Una vez más las y los normalistas confundieron la gimnasia con la magnesia sin importarles los derechos de terceros.
Este viernes con motivo de la conmemoración de los 10 años de la desaparición de los 43 estudiantes de la Normal Rural, Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, normalistas de 11 escuelas de Oaxaca marcharon desde el antiguo edificio del Instituto Estatal de Educación Pública, ubicado en inmediaciones de Santa LucÃa del Camino hasta el zócalo de la capital oaxaqueña,
Sin embargo, como es común y cada vez más de parte de estos grupos el daño al patrimonio ajeno no les interesó y realizaron pintas a su paso en fachadas de edificios públicos y privados, lo que generó la molestia de la ciudadania.
A su paso, lanzando consignas de justicia las y los estudiantes  encapuchados rayaban con aerosoles negro y rojo paredes de la terminal de primera clase y otros negocios que se olvidan son particulares.
“La fecha se recuerda, la recordamos todos, pero eso no significa que se desquiten con nosotros”, señaló indignado un comerciante.
Doña Luz que vive sobre carretera 190, por donde transitó la marcha, muy molesta exigÃa respeto a los manifestantes : “Si fueran mis hijos no andarÃa en estas cosas”, les advirtió al tiempo en que pregunto si no habÃa autoridad que les metiera al orden.
Asà durante su recorrido, las y los normalistas lejos de ganar simpatÃas por la exigencia de la verdad y la justicia, lo único que provocaron fue el rechazo ciudadano que exige a las autoridades un alto a este tipo de manifestaciones que cuestan mucho a ‘particulares y gobierno que cotidianamente se encargan de despintar las paredes.